Saber que tienes la hepatitis C no es una noticia agradable. Es importante tener claro que los accidentes suceden y que puede ser simplemente un tema de mala suerte que te hayas infectado (o reinfectado).

Afortunadamente, hoy en día no tienes que esperar mucho tiempo desde el momento del diagnóstico hasta iniciar el tratamiento. En esta sección te explicaremos cómo acceder a la atención y el tratamiento de la hepatitis C, cómo contar a tus parejas sexuales que tienes hepatitis C y te proporcionaremos algunos consejos sobre salud sexual.