La prueba de la hepatitis C

¿Por qué realizarse la prueba del VHC frecuentemente?

Cuanto más pronto sepas que tienes la hepatitis C antes podrás iniciar el tratamiento y curarte. Que te deriven al médico especialista en cuanto obtengas un resultado positivo en la prueba del VHC, te permitirá ponerte en tratamiento con rapidez. Una vez curado, ya no puedes transmitir el virus.

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  Si no sabes que tienes el virus lo podrás transmitir fácilmente. Por lo tanto, puedes realizarte la prueba del VHC con frecuencia si estás en riesgo y tratarte cuanto antes si te has infectado. Si el tiempo entre la infección y el diagnóstico y tratamiento es corto, se reducirá la probabilidad de transmitir el virus.

  El tratamiento de la hepatitis C está cubierto por el sistema sanitario público español. Si te has infectado, tienes una probabilidad de entre el 30% y el 40% de curarte de forma espontánea –es decir, sin tratamiento–; se reduce hasta el 10-15% si tienes el VIH. Puede ser que tu médico te proponga esperar un tiempo antes de ofrecerte tratamiento por si tu organismo lo elimina por sí solo.

¿Con qué frecuencia debería realizarme la prueba del VHC?

Puedes realizarte la prueba cada 3 meses si tus prácticas sexuales entrañan riesgo de transmisión o si se han producido casos dentro de tu red de contactos sexuales.

¿Cuándo debería hacerme pruebas adicionales?

Puedes realizarte pruebas adicionales si has tenido una práctica de riesgo considerable y faltan aún varios meses para tu próxima prueba rutinaria. En este caso, la prueba de detección del ARN del VHC permite detectar más rápidamente la infección.

¿Dónde realizar la prueba?

Existen diversos centros de detección comunitarios y ONG en los que te puedes realizar la prueba del VHC de forma rutinaria. También puedes acceder a las pruebas a través del sistema sanitario público en tu centro de atención primaria (CAP). Puedes encontrar más información en el siguiente enlace.

Tipos de pruebas

Hay diversos tipos de prueba del VHC, cada una con sus propias particularidades.

1) Prueba de detección del VHC

Prueba de anticuerpos

Detecta la hepatitis C en el momento en que tu organismo comienza a producir anticuerpos de forma significativa.

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  Normalmente, arrojan resultados positivos a partir de los 2 meses de la infección, aunque en personas con el VIH pueden tardar más tiempo. No es la prueba más adecuada para detectar una infección muy reciente. Esta prueba no será útil si ya tuviste la infección por el VHC en el pasado, pues siempre dará un resultado positivo aunque te hayas curado. Su principal ventaja es que es una prueba barata. Un resultado positivo en la prueba de anticuerpos necesita ser confirmada con la prueba de ARN.

  Hoy en día, existen varias pruebas rápidas en el mercado para la detección de anticuerpos frente al VHC, que pueden realizarse de manera sencilla a partir de fluido oral o en sangre obtenida por punción dactilar, y que permiten ofrecer el resultado en 15-20 minutos en el centro de atención.

Prueba de ARN

Detecta el VHC buscando material genético del virus en sangre. Puede hacerlo al poco tiempo tras la infección.

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  Puede detectar el virus al cabo de muy pocos días de producirse la infección (dentro de las primeras dos semanas). El test detecta ARN del VHC en sangre, lo que es indicativo de una infección activa. Además, si tuviste la infección en el pasado y te curaste, es la prueba adecuada para detectar una reinfección si hay sospechas al respecto. La prueba es cara, por lo que suele reservarse para confirmar los resultados positivos a una prueba de anticuerpos o para detectar los casos de reinfección.

Prueba de sangre seca

Se trata de una prueba que detecta con fiabilidad el ARN del VHC a través de unas gotas de sangre tomadas del dedo.

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  Consiste en obtener unas gotas de sangre mediante punción dactilar que se dejan secar sobre una tarjeta de papel absorbente especialmente diseñada. Estas muestras pueden ser obtenidas por personal no sanitario. Una vez seca la sangre, la tarjeta se almacena en una bolsa individual hermética con desecante, donde se puede conservar a temperatura ambiente por un tiempo limitado hasta ser analizada en un laboratorio especializado. Cabe destacar que las muestras de sangre seca pueden enviarse por correo postal o mensajería, al tratarse de material no biopeligroso, lo que hace posible incluso la autotoma de esta muestra en casa. Las características de este test permiten que pueda realizarse en zonas remotas con poco acceso a laboratorios o incluso en casa para aquellas personas que no desean acudir a centros sanitarios convencionales.

  Esta prueba estaría especialmente indicada para diagnosticar infecciones recientes en personas que tienen un mayor riesgo de exposición a la hepatitis C. En Cataluña y el resto del España, la prueba de sangre seca se viene utilizando en algunos centros de reducción de daños que atienden a personas usuarias de drogas inyectables. Si deseas más información sobre esta modalidad de prueba, puedes consultar en este enlace.

2) Otras pruebas

Prueba de la función hepática

Se trata de un análisis de sangre que detecta alteraciones en determinados valores del funcionamiento del hígado. Un aumento de dichos valores podría indicar la presencia de hepatitis C.

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  La prueba solo está disponible a través de un laboratorio clínico ya sea del sistema sanitario público o privado. La prueba no detecta la presencia del VHC sino que mide los niveles de varias proteínas hepáticas. El incremento de enzimas hepáticas puede ser un indicador de inflamación del hígado causada por el VHC. También puede haber otras causas que expliquen la inflamación del hígado –como el consumo de alcohol, drogas o medicamentos que pueden alterar también los niveles de las enzimas hepáticas–. Para determinar si un incremento de las enzimas hepáticas está causado por el VHC serán necesarias pruebas adicionales (como una prueba de ARN del VHC) que confirmen la sospecha de una infección por la hepatitis C.

  Un aspecto negativo de la prueba de enzimas es que los niveles de enzimas oscilan y, si no se realiza la analítica en un momento en el que están elevadas, podría pasar desapercibida la elevación.