¿Cómo reducir el riesgo de transmisión?

Estrategias generales

Para reducir el riesgo de transmisión del VHC tienes a tu disposición toda una serie de estrategias.

• Quiero saber más
  • Utilizar siempre tu propia ducha anal. Si tienes que usar la ducha anal de otra persona, asegúrate de saber cómo desinfectarla.
  • Llevar siempre contigo tu propio bote de lubricante. Asegúrarte de que tu compañero sexual lava y desinfecta sus manos antes de coger tu bote de lubricante.
  • Penetración anal: El uso de preservativos reduce el riesgo de VHC y otras ITS. Si no los utilizas, intenta que no eyaculen en tu ano y que no entre semen en él.
  • Estimulación anal: Utiliza siempre tus propios dildos o juguetes sexuales en tu ano. No los compartas y evita que el lubricante de otra persona acabe en tus juguetes. Si quieres compartir tus juguetes asegúrate de saber cómo desinfectarlos.
  • ‘Fisting’: Los guantes reducen el riesgo de transmisión del VHC. Limpia y desinfecta tus manos inmediatamente después de practicar ‘fisting’ incluso aunque uses guantes.
  • Drogas: Evita compartir ‘rulos’, jeringuillas, agujas, pipas, etc.
  • Si eres pasivo, emplea tu propia toalla y no la compartas.
  • Limpia y desinfecta el ‘sling’, el banco/potro o la sabana de látex o vinilo donde vayas a tumbarte o sentarte para practicar sexo. Antes de apoyarte, pon tu propia toalla sobre la superficie.
  • Si realizas una pausa durante el sexo, puedes lavar tu ano y genitales con jabón neutro o gel de baño y aclarar abundantemente con agua. Esto evitará que dejes trazas de lubricante en cualquier superficie en la que te apoyes, reduciendo el riesgo de transmisión del VHC si realizas sexo con alguien más.
  •  Nunca utilices desinfectante en tu pene o ano, ya que puede irritarlos. Lo máximo que se recomienda para reducir la transmisión del VHC es lavarse con jabón y aclarar con abundante agua.
  • Por muy cuidadoso que seas, siempre puede haber riesgos: los accidentes siempre son posibles. Por tanto, puedes realizarte pruebas de la hepatitis C cada tres meses, aunque uses estrategias de reducción de daños. Puedes aprovechar para realizarte también pruebas de otras ITS.
  •  Si te has infectado, se recomienda tratar la infección en cuanto sea posible. Una vez curado, ya no podrás transmitir el virus.
  • Es recomendable que –si te han diagnosticado– hables con tus parejas sexuales sobre ello para que se realicen las pruebas. Se recomienda que intentes llegar hasta tus parejas de los 6 meses previos al diagnóstico. Ello puede ayudar a que el VHC salga de tu red de contactos y prevendrá también que puedas reinfectarte en el futuro.

Nota: El texto continúa después de las viñetas. Si quieres conocer la primera parte de estas viñetas, cliquea aquí.

Consejos para situaciones específicas

Puedes hacer muchas cosas para evitar la hepatitis C. Las siguientes estrategias están dirigidas a reducir el riesgo de transmisión para situaciones específicas.

• Sexo anal en general
  • Escribe tus iniciales en tu bote de lubricante. De este modo, los demás sabrán que es tuyo.
  • Evita entrar en contacto con los restos de lubricante de tus parejas sexuales.
  • ¿Eres activo? Evita introducir los dedos en tu ano. Podrías pasar el VHC a tu ano si este se encuentra en tus dedos en los restos del lubricante. O podrías pasar el virus desde tu propio ano al de tu pareja o parejas sexuales.
  • ¿Eres pasivo? Evita introducir tus dedos en el ano del activo. Podrías transferir el virus del lubricante de tus manos a su ano o el virus de su ano al tuyo.
  •  Si has seguido algún tratamiento médico recientemente en tu ano, espera unos días antes de volver a tener relaciones sexuales.
  • No practiques sexo si tienes herpes. Las lesiones causadas por el herpes pueden facilitar la entrada al organismo del VHC.
• Durante la penetración
  • Quítate los ‘piercings’ del pene para reducir el riesgo de sangrados o heridas.
  • Usa mucho lubricante. Reducirá el riesgo de heridas o sangrados.
  • Si utilizas saliva para lubricar, cambia a lubricante en cuanto sea posible. La saliva solo lubrica durante un corto periodo de tiempo y se seca fácilmente.
  • Sácate el condón con cuidado al finalizar la penetración y lava y desinfecta las manos justo después. Si has realizado sexo anal con alguien con la hepatitis C, el virus estará en la parte externa del condón.
• Estimulación anal con los dedos, dildos y otros juguetes
  • Mantén tus dildos y juguetes alejados de los del resto de compañeros sexuales y asegúrate de que no entran en contacto entre ellos. De este modo, evitarás el riesgo de que alguien toque tus dildos o juguetes con sus dedos impregnados de lubricante.
  • Lava y desinfecta tus manos antes de tocar los juguetes o dildos de otra persona. Tus dedos pueden tener restos de lubricante (tuyo o de otra persona).
  • Es preferible llevar guantes si vas a utilizar tus dedos, dildos o juguetes en otra persona.
• ‘Fisting’
  • Usa lubricante acuoso o de base siliconada para evitar que los guantes de látex se rompan. Si prefieres lubricantes oleosos o grasientos, utiliza guantes de nitrilo.
  • Si eres pasivo y alérgico al látex, usa guantes de nitrilo.
  • Utiliza mucho lubricante. Ello reduce el riesgo de sangrado. Puedes usar botellas especiales con cánula que permitan poner lubricante en tu ano profundamente. Nunca compartas estas botellas. Suelen venderse como duchas vaginales para mujeres. Aunque son de un solo uso, podrías reutilizarlas previa desinfección de 5 minutos en lejía. Es importante que aclares con agua extremadamente bien tras la desinfección, pues los residuos de lejía pueden ser muy irritantes.
  • Es importante ir poco a poco con el ‘fisting’. Nunca uses la fuerza.
  • Si ves que el lubricante se vuelve rosa, tómate un respiro, pues significa que alguien está sangrando. Si ocurre, puedes parar de practicar ‘fisting’ o de penetrar. Si tu ano sangra, usa agua fría para ayudar a contraer los vasos sanguíneos y detener el sangrado.
  • Quítate cuidadosamente los guantes tras su uso. Si has practicado ‘fisting’ con alguien con la hepatitis C, el virus puede hallarse en la parte externa del guante.
  • Lava y desinfecta tus manos y antebrazos inmediatamente tras practicar ‘fisting’. Se recomienda hacerlo incluso si has usado guantes. Lavarte inmediatamente al terminar previene que puedas diseminar restos de lubricante contaminados con el VHC.
  • Si aparte de realizar ‘fisting’ con tu pareja también lo has penetrado, lava también tu pene, escroto, ingles y vello púbico usando jabón neutro o gel de ducha. Aclárate bien con agua. Los dermatólogos recomiendan que no uses desinfectantes en tu pene o ano, ya que pueden afectar a tu membrana mucosa de pene, ano o recto. Si esto sucede, el riesgo de adquirir la hepatitis C aumenta. El mejor modo de librarte de cualquier residuo de lubricante es lavarte con jabón neutro o gel de ducha y aclararte bien.
  • No compartas tijeras de uñas, cortaúñas o limas. El VHC también puede sobrevivir y mantenerse infectivo sobre la superficies de estas herramientas. También debes evitar compartir maquinillas de afeitar y tu cepillo de dientes.
• Drogas
  • Si te administras drogas en el ano (‘booty bumping’), afectaría a las membranas mucosas anales y te haría más vulnerable a contraer el VHC.
  • Compartir pipas para fumar ‘tina’ (conocida también como ‘crystal meth’ o metanfetamina) puede entrañar riesgos, ya que si bebes un poco tus labios pueden resecarse. El calor de la pipa puede agrietarlos y si hay VHC en la boquilla de la pipa podrías contraer la infección.
  •  No compartas ‘rulos’ para esnifar drogas. Como consecuencia de la deshidratación de las mucosas al esnifar, pueden producirse pequeños sangrados no detectables que favorezcan la transmisión del VHC. Puede resultarte útil preparar muchos ‘rulos’ de plástico precortados, ponerlos en un recipiente y asegurarte que todos tiráis a la basura cada ‘rulo’ inmediatamente después de su uso. También puede ser útil que cada persona tenga un color diferente de ‘rulo’.
  • No compartas las jeringuillas para el ‘booty bumping’. Usa siempre tu propia jeringuilla y no la dejes cerca de otra persona. Asegúrate de que cada persona usa una jeringuilla diferente e identificable. El VHC puede sobrevivir por largos periodos de tiempo en las jeringuillas.
  • No compartas jeringuillas, agujas u otros materiales al inyectarte drogas. Asegúrate de que el material de cada persona sea identificable y que no se confundan fácilmente. Una vez usado el material, podéis arrojarlo a un contenedor de agujas que tengáis preparado.
  • No compartas filtros, algodones o recipientes para cargar y apoyar las jeringuillas. Tampoco uses la misma agua esterilizada que otras personas para disolver las drogas. El VHC puede sobrevivir mucho tiempo sobre la superficie de estos objetos.
  • Puedes adquirir jeringuillas, agujas o contenedores de agujas en cualquier farmacia o dispositivo sanitario de reducción de riesgos y daños (por ejemplo, los centros de atención a las adicciones o algunas ONG que trabajan en este ámbito).
  • Si quieres saber más sobre cómo reducir el riesgo de transmisión del VHC en la inyección de drogas, puedes consultar Slamming: Guía para la reducción de daños asociados al uso de drogas inyectables en la sesiones de sexo.
• Sexo con mútliples parejas
  • Presta especial atención a la desinfección en las sesiones de sexo en grupo.
  • Es preferible que las sesiones de sexo en grupo sean con hombres ya conocidos (‘follamigos’), dado que es probable que te resulte más fácil hablar sobre estrategias de reducción de riesgos y daños y advertirles acerca del VHC u otras ITS.
• En citas sexuales
  • Antes de practicar sexo con alguien, es importante comunicarle tus estrategias de reducción de riesgos y daños para evitar la hepatitis C.
  • Conservar los datos de contacto (especialmente el número de teléfono) de tus parejas sexuales de los últimos seis meses. Consérvalos durante más tiempo si te realizas las pruebas de la hepatitis C menos de dos veces al año. También es recomendable que mantengas los contactos de los anfitriones de las sesiones de sexo. Este punto es importante ya que puede ayudarte a contactar con otros asistentes a la sesión de sexo.
• Prepararse para una sesión de sexo
  • Si te gusta afeitarte tus testículos, hazlo unos días antes de practicar sexo. El afeitado puede generar pequeñas heridas que podrían favorecer la transmisión del VHC.
  • ¿Eres el anfitrión de la sesión? Proporciona un buen número de toallas (lavadas a 60ºC). De este modo, cada persona puede tener su propia toalla. Si cada persona puede tener su propio color, ayudará a evitar confusiones.
  • Asegúrate de que hay suficientes rollos de papel (para eliminar residuos de lubricante antes de lavar y desinfectar).
  • Deja un cubo de basura accesible para que se puedan depositar fácilmente en él papeles, condones y guantes.
  • Es importante que la iluminación sea suficiente como para identificar sangrados. No uses luces rojas.
  • Si la sesión tiene lugar en la casa de otra persona, es recomendable que lleves tus propios desinfectantes, jabón y lubricante. Lleva algunas toallas para apoyarte sobre ellas si eres pasivo. No des por hecho que el anfitrión de la sesión te las ofrezca o tenga suficientes para todos los participantes.
• Después de la sesión de sexo
  • Si has tenido una práctica de riesgo durante la sesión, realizarte una prueba del VHC te permitirá saber si te has infectado.
  • Si te han diagnosticado de la hepatitis C es recomendable que inicies el tratamiento tan pronto como sea posible. Curarte rápido te permitirá preservar tu salud y evitar que el virus se transmita a otras personas. En este caso, se recomienda que contactes con tus parejas sexuales de los 6 meses anteriores para que puedan realizarse las pruebas. Avisar a tus parejas también será beneficioso para ti, ya que minimizarás el riesgo de reinfectarte una vez curado. Es frecuente que dentro de un grupo de personas que suelen tener sexo entre sí el VHC se propague con mucha facilidad de unos a otros y de forma repetida.

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