Mensajes clave:

  • Tu médico sabrá si estás oficialmente curado a las 12 semanas de finalizar el tratamiento. Hasta entonces, aún puedes transmitir el virus a tus parejas sexuales.
  • Hasta que no te declaren curado, es importante que utilices preservativos y –en determinadas prácticas sexuales– guantes y ser más cuidadoso de lo habitual para no compartir el brazo de ducha (tubo) en tus duchas anales, el lubricante, juguetes y utensilios para la administración de drogas.
  • Durante este periodo, puedes prevenir la transmisión practicando sexo con solo una pareja sexual cada vez y puedes reducir todavía más los riesgos si en cada práctica únicamente adoptas un rol (insertivo o receptivo).

Sé precavido hasta las 12 semanas posteriores al tratamiento

Hay tres fases entre el momento en el que te diagnostican la hepatitis C y cuando alcanzas la curación. Más abajo, encontrarás información sobre la probabilidad de transmitir el virus en cada fase y por qué es importante tomar precauciones extra para proteger a tus parejas sexuales en cada una de ellas.

  • Quiero saber más

    Primera fase: Antes del tratamiento

    Si te han diagnosticado infección por el VHC, tu médico te pedirá que esperes –al menos– un mes antes de iniciar el tratamiento. Ello se debe a que quieren determinar si tu organismo puede eliminar por sí solo la infección. Tras un mes, probablemente sabrán si esto ha pasado o si es probable que pase, aunque el tiempo a esperar antes de empezar el tratamiento dependerá de cada persona y de las analíticas de seguimiento que se vayan realizando.

    Probabilidad de transmitir el virus durante la primera fase: En esta fase tu carga viral puede ser extremadamente alta, con millones de partículas víricas por mililitro de sangre. Como no se toma tratamiento, el riesgo de transmisión es muy elevado.

     

    Segunda fase: Durante el tratamiento

    El tratamiento normalmente durará entre 6 y 8 semanas y reducirá con rapidez la carga viral, es decir la cantidad de virus en tu sangre. En el 90% de los casos, la carga viral será indetectable a las cuatro semanas de iniciar el tratamiento. Aún sin estar indetectable en ese momento, la carga viral será muy baja. Con todo, es muy importante que tomes el tratamiento hasta el final para acabar de erradicar todo el virus que pueda quedar en el organismo, ya que, a pesar de estar indetectable, podría aún rebrotar.

    Probabilidad de transmitir el virus durante la segunda fase: Una vez que tu carga viral se vuelve indetectable o llega a niveles muy bajos, el riesgo de transmisión del VHC es bajo. Sin embargo, es difícil decir cuán bajo es, por lo que todavía existirían probabilidades de transmitir la hepatitis C.

     

    Tercera fase: Después del tratamiento

    Incluso tras finalizar el tratamiento con carga viral indetectable, todavía no puede afirmarse que te hayas curado. Es siempre necesario esperar hasta las 12 semanas posteriores a la finalización del tratamiento para saber si te has curado. Esto se debe a que, a veces, el virus podría volver a aparecer después de terminado el tratamiento. Una vez transcurridas las 12 semanas, si tu carga viral sigue indetectable, estás oficialmente curado. El 95% de las personas que se tratan, se curan. Por tanto, si tratas tu hepatitis C aguda y tomas los fármacos tal y como te han sido prescritos, la probabilidad de no curarte es extremadamente baja.

    Probabilidad de transmitir el virus durante la tercera fase: Aunque ya es muy improbable que se pueda transmitir el virus durante esta fase, es importante seguir siendo precavido hasta no ser declarada tu curación, dado que si formas parte del 5% que no logra curarse, durante estas 12 semanas el virus rebrotará y, además, muy probablemente será resistente al tratamiento que te han dispensado. Por ello, podrías no solo transmitir el VHC, sino que además podría ser una cepa resistente a algunos fármacos.

Aún puedes practicar sexo

Tu vida sexual no tiene por qué detenerse tras el diagnóstico de la hepatitis C. No obstante, será muy difícil tener sexo absolutamente sin riesgo de transmisión hasta la quinta semana de tratamiento. Ello se debe a que, hasta ese momento, tu carga viral puede ser muy elevada. Pero incluso tras la quinta semana –y hasta la semana 12 tras terminar el tratamiento– aún existe la posibilidad de transmitir el virus.

Por ello, además de las estrategias de reducción de riesgo que ya sigues habitualmente, sería recomendable:

  • Usar preservativos en las relaciones sexuales con penetración y guantes durante el ‘fisting’.
  • Practicar sexo con una sola pareja cada vez (evitar tríos, orgías, saunas y zonas de ‘cruising’).
  • Mantener únicamente un rol durante la práctica (activo o pasivo, en el siguiente apartado explicaremos por qué).

¿Por qué mantener únicamente un rol? (activo o pasivo)

Si cambias de rol durante las prácticas sexuales, corres el riesgo de transmitir el virus a través del lubricante.

  • Quiero saber más

    Imagina la siguiente situación: eres el pasivo y tocas tu ano (o el pene del activo) y él te penetra. Al cabo de poco tiempo, te tocas tu pene con la misma mano (quizás mientras te masturbas). Si ello sucede, puedes transferir fácilmente lubricante (con el virus) de tu ano a tu pene y vello púbico. Si en ese momento cambias de rol y pasas a ser el activo y comienzas a penetrar a tu pareja, corres el riesgo de transmitirle el virus.

Prácticas sexuales seguras con relación al VHC

  • En el sexo oral
  • Quiero saber más
    • Besos (a no ser que tus encías sangren)
    • Hacer una felación
    • Dar un beso negro -‘rimming‘- (salvo que tus encías sangren)
    • Masturbar a tu pareja
    • Que te masturbe tu pareja (asegúrate de que tu semen no llega a su boca, pene o ano). El semen puede contener virus

    Si recibes una felación y eyaculas, tu semen puede contener virus. Recibir un beso negro es seguro en circunstancias normales, pero en ocasiones puede haber virus en tu fluido rectal, lo que supondría un riesgo para la persona que te lo hace.

  • En el sexo anal
  • Quiero saber más

    Si durante el sexo anal eres el activo, se considera seguro:

    • Tener sexo con preservativos. Usa mucho lubricante, comprueba a menudo que el condón está en su sitio y cámbialo cada 15 minutos. Es recomendable asegurarte de que el condón es del tamaño adecuado; elige uno que se ajuste de forma adecuada sin deslizarse.
    • Usar juguetes o dildos con tu pareja (siempre que sean los suyos los que le penetren).
    • Realizarfisting’ con guantes, salvo que tengas heridas en tus antebrazos. Ponte los guantes antes de tocar el ano de tu pareja

    Puedes evitar riesgos evitando que tu pareja toque tu ano durante el sexo y evitando tocar tu propio ano.

    Si durante el sexo anal eres el pasivo, resulta seguro:

    • Ser penetrado con preservativo. Utiliza mucho lubricante, comprueba con frecuencia que el condón sigue completamente puesto y cambiad el preservativo cada 15 minutos, ya que el riesgo de rotura de los condones aumenta tras los 15 minutos de uso. Asegúrate de que el condón es de la talla adecuada, es decir, que se ajusta con facilidad sin deslizarse.
    • Recibir ‘fisting con guantes (a no ser que tu pareja tenga heridas en los antebrazos).
    • Usar dildos o juguetes en tu ano (siempre que sean los tuyos).

     

    Si juegas con el ano de tu pareja durante el sexo, puedes tener heridas en tus dedos o bajo tus uñas, o tener residuos de lubricante en tus dedos con el VHC.

    Además, puedes asegurarte de que tu pareja no se sienta o se recuesta en una superficie con residuos de lubricante (como por ejemplo sobre tu toalla), dado que puede contener partículas víricas.

  • En otras prácticas sexuales

  • Quiero saber más

    El BDSM es seguro mientras evites el contacto entre sangre y sangre, por ejemplo el roce con heridas, y no compartas los instrumentos utilizados. El juego con tus pezones es seguro siempre que la otra persona lo haga con el cuidado suficiente para evitar que la piel se desgarre. La orina es segura mientras no haya sangre en ella. Practicar ‘scat’ (jugar con heces) no es seguro: pueden haber partículas del VHC en tus heces.

Drogas

Es muy recomendable que no uses drogas o alcohol si tienes la hepatitis C, ya que tu hígado puede estar inflamado por la infección. El alcohol o las drogas pueden sobrecargar tu hígado ya afectado por el virus (incluso si ya estás en tratamiento frente al VHC). Tus medicamentos, el alcohol y las drogas deben ser procesados en el hígado. Si le añades esta presión, el hígado podría no metabolizar de modo adecuado los fármacos, lo que aumentaría el riesgo de padecer efectos adversos. También, por la misma razón, podrías experimentar problemas de sobredosis con las drogas.

¿Qué hacer si se da una situación de riesgo durante el sexo?

Si durante el sexo se ha producido una situación de riesgo de transmisión del VHC, puedes contactar con tu enfermera (de la clínica de ITS, del VIH [si vives con el virus], etc.) para que gestione una alerta a tu pareja o parejas sexuales potencialmente afectadas.

Decir o no decir a tu pareja, o parejas, que tienes la hepatitis C

A muchos hombres les cuesta decidir si tienen que contar a sus parejas sexuales que tienen la hepatitis C antes de practicar sexo.

  • Quiero saber más

    Si le comunicas a tu pareja sexual que tienes la hepatitis C, facilitas que ambos os impliquéis en realizar prácticas más seguras. También ayudará a que tu pareja entienda por qué repentinamente quieres usar condones. Sin embargo, revelar que tienes el VHC también supone un dilema, ya que es posible que muchos hombres no quieran practicar sexo contingo si saben que tienes el virus, y la mayoría pueden no querer hacerlo hasta que te hayas curado. Es una situación difícil de gestionar y no hay consejos que lo hagan más fácil. Será, al fin y al cabo, tu decisión.